Poeta como tú: "Morderse la lengua hasta reventar".
MORDERSE LA LENGUA HASTA REVENTAR
" Traga, traga y traga...Obedece y sé perro sumiso...
No.
Tragar, tragar, tragar hasta reventar...
No.
Aunque me cueste el amor de mi vida,
aunque las nubes descubran un claro de esperanza,
aunque el sol radie y me ponga repleto de energía....
No se puede luchar contra el destino,
no se puede pelear a la contra,
no se puede morir de agonía...
Se puede dejar el honor a un lado,
se puede apartar el orgullo,
pero siempre a mi lado,
hasta el final, mi dignidad
de ser humano, junto con
mi libertad a maldecirte mil
y una veces, junto a mi desprecio
hacia los ladrones de alegrías,
las rameras que inyectan odio,
envidias y codicias...
Fuego en mi interior que me hace retumbar cientos de órganos
que palpitan y se calcinan como de un viejo motor de un vehículo
antiguo se tratara, como si se infectara de pús y mancharan las
paredes de mi corazón rezumando resistencia a las leyes de la lógica
que no existe...
Este es el preludio a un gran día, el día en que te haga tragar tus hechos
o tus palabras, el día que por fín sea yo en plena efervescencia,
el día en que los cobardes se postren ante mí y llegue con ira
y llamaradas de fuego a poner paz y orden en el caos de la ignorancia,
en el hielo del egoísmo que nos hace poderosos tras galones de papiro.
Verguenza y desasosiego después, el día en que mi lengua deje de sangrar...
Traga, traga y traga...Obedece y sé perro sumiso...
No.
Tragar, tragar, tragar hasta reventar...
No.
Ejemplo de muchos,
modelo de pocos.
Y puedes tragarte entonces tu verborrea barata, tus órdenes y tus palabras interesadas,
puedes entonces sentirte como la mayor mierda del mundo, porque eso es lo que trae
consigo fuego de un tiempo, confusión eterna, malicia incipiente, mal sexo en la cama...
Y puedes sentirte por un minuto ridícula por tus absurdos planteamientos, y puedes ver
que no eras nada, y puedes ver que la vida es agachar para todos la cabeza, y puede que,
entonces, veas como alguien a quien trataste de empequeñecer, se agiganta y te hace morder
el polvo, y puedes entonces sentirte enana y acobardarte como un conejo asustadizo al paso del lobo.
Ejemplo de muchos,
modelo de pocos.
Puedes, por fín, aprovechar la lección del maestro o puedes fingir tu propia muerte
para seguir haciendo daño y llevando por bandera tu gran cabeza repleta de mierda
ideológica o ver explotar tu corazón de desamor y tu vida llegar a su fín haciendo
balance de todo el odio que desprendiste y de toda la paz que dejaste cuando fuiste
pisoteada por el gigante que siempre seguirá siendo pequeño a tu lado, siempre
porque es diminuta pretensión la de sembrar en los demás, lo que no quiero para mí...
Y cuando lo veas alejar del camino, aprende la valiosa lección de saber tragarse las palabras
a tiempo...justo antes de que alguien te las haga tragar..."
"Aprende la valiosa lección de saber tragarte tus palabras
a tiempo...justo antes de que alguien te las haga tragar..."
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